Todo en motores para puertas y sus variantes

Cada vez son más las puertas de garaje, de comunidades de vecinos, de comercios y de oficinas que están automatizadas y para que su funcionamiento y rendimiento sea óptimo es esencial saber escoger los motores para puertas adecuados para cada caso.

Una puerta, un motor

Aunque parezca obvio cada puerta necesita un motor concreto y decimos esto porque a menudo se falla en la elección de los motores para puertas de garaje o de comercio.

Con frecuencia se piensa que contra mayor potencia tenga el motor mejor funcionará y no es así. Lo importante es disponer de un sistema de mecanización acorde a las dimensiones de la puerta, al peso, al tipo de material del que está hecha y a la frecuencia de uso.

De esta manera su rendimiento será óptimo y además su consumo estará de acuerdo a sus necesidades y no se despilfarrará energía de manera innecesaria.

Motores para puertas y sus prestaciones

Automatizar una puerta no es solo que se abra y se cierre sola, las motorizaciones tienen otra serie de prestaciones que complementan esta función y que son un valor añadido.

Entre estas prestaciones está el temporizador o control del tiempo de apertura. Este sistema es muy práctico ya que permite regular el tiempo de espera hasta que la puerta se cierra. Por ejemplo en el caso de un garaje comunitario resulta muy útil ya que se puede ampliar el tiempo en las horas de mayor afluencia de público como puede ser a primera hora de la mañana y al acabar la jornada laboral.

También hay sistemas especiales de retención que garantizan la seguridad para que la puerta no se desplace mientras se está pasando y dañe a personas y vehículos.

Otra de las prestaciones o extras de los motores para puertas son las cápsulas externas que recubren los componentes mecánicos y electrónicos preservándolo de las inclemencias del tiempo y asegurando su buen funcionamiento.