Puertas seccionales para garajes privados y comunitarios

Las puertas seccionales resultan una elección adecuada como puerta de garaje privado o comunitario. El tipo de apertura de estas puertas, verticalmente hacia arriba, las hace ideales para lugares en los que se busca aprovechar al máximo el espacio.

Uno de los problemas a los que hay que dar solución cuando se busca puerta de garaje es adaptarse a un espacio y hueco determinado. Esto es más habitual en casas unifamiliares o chalés adosados, aunque también se da en garajes y entradas comunitarias.

Puertas Seccionales Garajes Privados

A veces el problema al que hay que dar solución es que nos encontramos ante una reforma y el hueco ya está hecho y tenemos que hacer y colocar una puerta nueva. Para estos casos en los que el espacio y forma de la puerta está determinado, las puertas seccionales suelen dar buenos resultados. Por sus características las puertas seccionales se pueden adaptar a huecos rectangulares, inclinados, con arcos, etcétera.

Otra de las ventajas de las puertas seccionales frente a otro tipo de sistemas de apertura es que se aprovecha al máximo el espacio. Al abrirse hacia arriba y desplazarse la puerta por el techo se aprovecha todo el ancho del hueco de entrada. Esto hace que sobre todo en garajes de viviendas particulares sea adecuado.

Las prestaciones de las puertas de garaje seccionales también garantizan la máxima seguridad. Estos sistemas de apertura para cocheras y portones cuentan con las homologaciones necesarias y cumplen la normativa de la Unión Europea. Todos los mecanismos y automatismos de apertura y cierre de las puertas seccionales están provistos de sistemas de antiaplastamiento.

Los materiales y diseños de las puertas seccionales, con espuma aislante en el interior, gomas perimetrales y distintos tipos de herrajes, permiten crear espacios estancos y bien aislados que permitan tener los vehículos y enseres en perfecto estado.

En cuanto al diseño, las puertas secciones se pueden realizar con diseños muy diversos, completamente cerradas, con una zona de pequeñas ventanas, con rejillas de ventilación o respiraderos, con una puerta peatonal… Al gusto y necesidad de cada caso concreto.