Una de las opciones para una puerta de garaje es la puerta batiente. Por sus características y prestaciones es una puerta que resulta acertada para garajes privados, pero también para entradas de vehículos a almacenes y recintos industriales o para el acceso a zonas residenciales y comunitarias.
Las puertas batientes funcionan con un sistema de motorización que hace que la puerta se desplace hacia un lado permitiendo fácilmente la entrada y salida de vehículos. Este tipo de puertas se puede realizar con una sola hoja o con dos. Esto dependerá del tamaño destinado para la puerta, el material con el que se realice y, por supuesto, los gustos y preferencias de cada persona.
Respecto a los materiales en los que se pueden hacer las puertas batientes, principalmente suelen ser en madera o metálicas. Obviamente las metálicas y, en concreto las de aluminio soldado, son mucho más resistentes y fáciles de mantener. Dadas las características de este material resulta apropiado para puertas que están a la intemperie y que están expuestas a condiciones climatológicas extremas como lluvia, viento, mucho sol… Al no oxidarse el aluminio no conlleva grandes gastos de mantenimiento y resulta más práctico y económico que otros materiales.
Los automatismos de apertura y cierre de puertas batientes pueden ser diversos, dependiendo siempre de las necesidades de cada caso. Existen mecanismos que permiten accionar las puertas pulsando un botón o introduciendo una tarjeta identificativa, con un mando a distancia o incluso con un sensor de presencia; garantizando siempre la seguridad del garaje.
Además, los distintos motores para las puertas batientes están realizados con materiales de testada calidad que garantizan la seguridad, durabilidad y también el silencio de los sistemas de apertura.
Las puertas batientes para garajes y zonas comerciales, industriales o residenciales pueden hacerse con diseños muy distintos como lisas, con listones, troqueladas, con rejas y, por supuesto, en distintos colores.