Dos soluciones para tu casa con una puerta corredera de aluminio exterior

Conseguir la máxima comodidad en casa es lo que todos buscamos. Con una puerta corredera de aluminio exterior puedes encontrar dos soluciones prácticas que mejorarán la accesibilidad y  el ahorro de energía en tu hogar. 

Una puerta corredera de aluminio exterior para abrir tu casa al jardín 

Si en tu casa tienes un jardín pegado a la vivienda una forma de sacarle el máximo partido puede ser con una puerta corredera de aluminio exterior. Gracias a este material puedes diseñar una puerta de grandes dimensiones. Una puerta de dos hojas que puedas abrir a la derecha o a la izquierda dependiendo de la situación y de la distribución de los muebles. 

Con una amplia puerta corredera de aluminio exterior se da más luminosidad a la habitación. Es casi como unir jardín y salón creando una mayor sensación de amplitud

La ventaja añadida del aluminio es que permite hacer unas puertas con marcos finos que permiten tener más centímetros de cristal. Estructura y marcos de gran resistencia que garantizan la firmeza de la puerta

Además el aluminio es resistente a las condiciones climáticas, por lo que no se estropea ni con la lluvia ni con la fuerza del sol. 

Mejora la accesibilidad de tu garaje con una puerta corredera aluminio exterior 

Otra de las ubicaciones en las que una puerta corredera de aluminio exterior resulta perfecta es en un garaje. Este tipo de puertas son las más demandadas como punto de acceso en una valla perimetral de un chalet o finca.

En estas condiciones una puerta corredera es muy práctica porque se desplaza de manera paralela al muro dejando todo el hueco de entrada libre. 

Con la firmeza del material se puede hacer un diseño amplio, de dos plazas que permita pasar a dos vehículos a la vez. Además, el aluminio es muy maleable y los diseños se pueden personalizar hasta conseguir una puerta funcional y con la estética deseada.