En las puertas automáticas buscamos accesibilidad, comodidad y seguridad, pero también estética y armonía. Y eso es lo que vas a conseguir con un kit de puerta corredera rústica. Todas las ventajas tecnológicas que ofrece un sistema de motorización sin que desentone en un entorno rústico rural.
Armonía y tecnología con un kit de puerta corredera rústica
Las puertas correderas son uno de los sistemas más utilizados como acceso a garajes y en el caso de un entorno rural también se emplean como entrada a un granero rehabilitado como vivienda o como puerta perimetral de una finca.
En cualquiera de estas situaciones, la estética y armonía del conjunto de la edificación cuenta mucho. Los detalles como un motor demasiado moderno chirrían y de ahí la necesidad de buscar un kit para puerta corredera rústica.
Estos kits existen y cuentan con un aspecto y forma que encaja en el entorno. Se trata de incluir un color, herrajes y acabados que imitan los mecanismos rústicos. Además los motores para puertas correderas son pequeños y discretos y casi no se ven.
Comprar uno de estos kit para una puerta corredera rústica no supone tener que renunciar a las prestaciones que ofrece la última tecnología. Cada uno de estos modelos ofrece la posibilidad de tener diferentes sistemas de control de apertura como mando a distancia, llave magnética, tarjeta de proximidad e incluso control biométrico a través de una aplicación del móvil.
Los dispositivos también cuentan con sistema de control y regulación de velocidad de apertura y cierre para adaptarlo a las necesidades de cada usuario. Incorporan sistema de frenada final para evitar golpes al llegar al final de recorrido.
Según el modelo de la motorización se dispone de un fotocélulas o sensores que ante la presencia de un obstáculo detienen el recorrido evitando aplastamientos. Todas las ventajas tecnológicas sin afectar a la estética rural.