5 motivos para instalar un automatismo a tu puerta corredera

Las puertas correderas para garajes o como cancelas perimetrales son uno de los modelos más habituales. Si además se incorpora un automatismo a la puerta corredera las ventajas se incrementan. Estos son 5 motivos que te van a convencer para motorizar tu puerta:

  1. Comodidad
  2. Seguridad
  3. Eficiencia energética
  4. Poco mantenimiento
  5. Durabilidad

Gana comodidad y seguridad con un automatismo para puerta corredera

Si tuviéramos que dar una sola razón para comprar un automatismo para una puerta corredera, sería la comodidad. Entrar y salir del garaje o de la finca sin tener que bajarse del coche para manipular la puerta, no tiene precio. 

Desde el coche se maneja la apertura y cierre de la puerta agilizando además el tránsito. Otro factor importante a tener en cuenta es que gracias a la apertura automática se incrementa la seguridad. No hay que salir del vehículo, cosa que puede ser peligrosa por la noche y zonas poco transitadas. 

Para el manejo de la puerta hay diferentes opciones. Desde tarjetas de proximidad o magnéticas hasta un simple pulsador o sistemas más sofisticados con cierre biométrico manejado desde una app en el móvil. Sistemas todos ellos que garantizan la seguridad de la finca y/o del garaje. 

Práctico y rentable

Las otras tres ventajas de incorporar un automatismo a tu puerta corredera van a aumentar la practicidad a la vez que contribuyen a ahorrar costes. Por un lado, un automatismo de puerta corredera ayuda a mejorar la eficiencia energética. En el caso de un garaje, el cierre automático evita que la puerta quede innecesariamente abierta y que se produzca un intercambio de temperatura entre exterior e interior. De este modo, la temperatura interior permanece constante y se evitan gastos relacionados con refrigeración o calefacción. 

Por otro lado, lo temidos gastos de mantenimiento son muy pocos. Actualmente los automatismos están muy preparados, muy ajustados y no requieren tareas de mantenimiento. Esto también repercute de manera positiva en su durabilidad. Se mantienen en perfectas condiciones de funcionamiento durante mucho tiempo. 

Todo esto se traduce en un ahorro importante de dinero. Es decir, la inversión realizada en la inversión queda rápidamente amortizada.