A menudo la impaciencia nos hace apostar por la opción más rápida, por la fórmula que nos permite disfrutar de lo que queremos sin esperas y esto es lo que puede sucedernos con el garaje. El debate entre comprar una puerta corredera de garaje de Leroy Merlin o encargarla a medida.
No hay una única respuesta, es una cuestión de sopesar los pros y los contras de cada opción.
Una puerta hecha en exclusiva para ti
Al hablar de una puerta de garaje hecha a medida es evidente que las ventajas van a ser muchas. El simple hecho de que tú tengas la posibilidad de decidir lo que quieres y cómo lo quieres ya es mucho.
Vas a poder escoger la calidad del material. El aluminio es fuerte y resistente y es garantía de firmeza, pero puedes aumentar el grosor para asegurar que ni los vaivenes diarios ni los eventuales golpes acorten la vida útil de la puerta.
También puedes añadir paneles interiores que aíslan térmica y acústicamente, que en el caso de las puertas cercanas a las viviendas es realmente importante.
Y la personalización de la estética es otro factor a favor de las puertas de garaje hechas a medida. Puedes escoger entre puertas de listones ciegos, troqueladas, de reja y decidir el tamaño de los listones y de los agujeros del troquelado. Por supuesto, también escoges el color: gris, negro, verde, rojo, madera… Y los extras como pueden ser ventanas superiores o una puerta peatonal, sin olvidar la automatización y tipo de cerradura.
El precio
Al hacer números, si que es posible que una puerta corredera de garaje de Leroy Merlin resulte más atractiva. Los productos realizados en serie son siempre más económicos, mientras que los hechos en exclusiva van incrementando su coste en función de lo elegido.
Esto quiere decir que al final la diferencia entre una y otra opción no sea tan grande.
Puerta corredera de garaje de Leroy Merlin
Escoger una puerta ya prefabricada es una solución rápida, sin grandes complicaciones. Tienes un abanico limitado de opciones para definir el modelo que más encaja con tu espacio y lo mismo con el estilismo, formas y colores.
Pero recuerda, todo lo que se salga de las opciones que te dan, serán concesiones que debes hacer. ¿ Hasta dónde estás dispuesto a ceder tu libertad?